🌼 Hola, soy Kafka.
De día, soluciono problemas reales. De noche, invento historias y mundos imposibles.
He vivido muchos años con los pies en la tierra encerrada en la biblioteca, estudiando sin descanso para para aprobar todos los exámenes, entregando trabajos a tiempo, llegando tarde a prácticas y ocupado jornadas enteras intentando ser cada día mejor.
Ahora siento que ha llegado el momento de darle a la creatividad el espacio que, durante todos esos años de formación, le negué.
Dejarla ser, simplemente, parte de mí. No soy escritora, ni ilustradora, ni músico profesional.
Pero he aprendido un poco de todo, como quien recoge piedras bonitas en el camino y las guarda en los bolsillos.
Soy una mente inquieta con una risa fácil: puedo pasar horas buscando la palabra perfecta… o acabar riéndome a carcajadas con una cerveza y una tontería. A veces, yo sola.
Me encontrarás a menudo con un cuaderno o una tableta en la mano, dibujando, escribiendo o simplemente pensando en cualquier cosa que me haga feliz. Tengo la costumbre de vivir en mi mundo, perderme en mis ideas y dar vueltas a teorías que, probablemente, solo tienen sentido para mi (y eso está bien).
También me gusta coleccionar momentos que me hacen sonreír. Algunos acaban en un dibujo, otros en un párrafo o en una canción, y unos cuantos se quedan solo en mi cabeza.
Dibujo como forma de respirar, escribo como forma de entenderme, tarareo para distraerme y a veces mezclo todo porque no sé elegir.
Disfruto de las historias bien contadas, de los personajes tan reales que parecen vivos, de los silencios que significan algo y de los detalles que otros pasan por alto.
Releo libros, vuelvo a ver películas, cambio mil veces de opinión y soy experta en hacerme preguntas imposibles.
Pero también me emociono con las pequeñas cosas: la música perfecta para una escena, un personaje que sonríe con los ojos, una imagen que palpita, una galleta con forma de lobo o la intrépida aventura que es perseguir una mariposa por el bosque ¡Y me encantan las tonterías!
Si tuviera que definirme con una imagen, sería un chibi con un vestido sencillo, zapatillas cómodas para recorrer el mundo, los ojos muy abiertos para no perderme ni un solo detalle y una mejilla sonrojada por la emoción de vivir cada día como si fuera único. Y tal vez, cargando una mochila llena hasta reventar… o el estuche de mi amado saxofón.
Y si tuviera que decirte quién soy, te diría: una persona motivada, que siente mucho, piensa demasiado y solo quiere compartir historias y dibujos que hagan la vida —si no más bonita— al menos un poco más divertida.

Dónde encontrarme

Todo lo que escribo está en Wattpad y AO3; todo lo que dibujo, en Pinterest y Instagram.